Hoy vengo a hablarte de algo que mucha gente me pregunta, y es de la organización de la comida para el trabajo; vamos, de cómo hacer los tapers.
Probablemente debido a la jornada laboral tienes que comer caaaaada día en el trabajo. Yo antes trabajaba en un hospital, y lo de comer cada día comida de allí no me acababa de convencer, aunque el menú solía ser bastante equilibrado, pero a mí me solía sentar mal. No me imagino si trabajara en una cadena de comida rápida… Así que lo mejor es que te lleves tu comida en un taper, ya que es más barato que comer cada día en el bar y por supuesto muchísimo más sano. Además de que comes lo que realmente te apetece.
La gente suele asociar aburrimiento a la comida de taper, pero eso no tiene porqué ser así.
Sólo necesitas buenas ideas y saber organizarte, ya verás que puedes llenar tu fiambrera con platos apetecibles, de cualquier tipo de menú, siguiendo una dieta sana y de paso ahorrando un dinerillo.
Te voy a dar las 7 claves para que comer de taper ya no sea un aburrimiento
1 – Los tapers
Compra tapers de calidad, que cierren bien herméticos, no se te vayan a abrir por el camino y líes un desastre.
Es muy importante que sean compatibles con el microondas para poder calentar la comida en el trabajo. Y que se puedan meter en el lavavajillas, así te ahorraras un trabajo, que limpiar los tapers es un engorro.
Los botes de cristal, como los de la mermelada, también son bastante útiles, sirven para transportar líquidos y es el tamaño perfecto para una ración de una sopa o una crema. Los botes pequeños son ideales para llevar los aliños de la ensalada.
También hay tapers con diferentes compartimentos, para llevar varios alimentos y que no se mezclen, como los típicos Bentos japoneses, ¡son tan monos y tan apetecibles! Así con un sólo cacharro puedes llevar toda la comida.
2 – Microondas
Los platos fríos son lo mejor para llevar al trabajo, pero no son los únicos. Si tienes microondas puedes llevar ¡casi cualquier comida!
Las comidas con caldos o salsas son ideales para llevar en tu fiambrera, ya que se secan menos al recalentarlas. Calienta la comida con el taper cerrado así no se evaporará el liquido, se calentará antes y no perderá sus propiedades.
Y recuerda limpiar un poco el microondas si derramas algo, que ya sabemos como suelen estar en los comedores de trabajo… Déjalo como te gustaría encontrarlo.
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3 – ¡ENSALADAS!
Ya sean de pasta, de legumbres o de verduras son muy buena opción ¡yo soy súper fan de las ensaladas! Y si de paso aprovechas las verduras de temporada estarán más ricas y tendrán un precio más económico.
Aliña la ensalada a la hora de comerla para que no se estropee. Para ello lleva el aliño ya preparado en un botecito. Solo quedará agitar y aliñar y tendrás lista tu ensalada.
4 – Fruta
Si te gusta comer fruta de postre o merienda llévala lavada, pelada y troceada. Así no te dará pereza comértela ni perderás tiempo, que a veces en el trabajo vamos un poco justos y si te tienes que parar a pelar una pera a lo mejor no te la comes.
Un truco para que las peras y las manzanas no se oxiden al estar peladas y troceadas, es rociarlas con el jugo de un limón.
5 – Ojo con el calor
Si en el trabajo no tienes nevera donde dejar tu comida tienes que vigilar lo que llevas, sobre todo en verano. Todo lo que contenga huevo y leche se puede estropear muy fácilmente, así que en este caso es mejor evitarlo.
6 – Cocina solo un día
Aprovecha si haces un sofrito para hacer varios platos que lo necesiten. O siempre puedes cocinar gran cantidad de algo y congelarlo.
Lo mejor es dedicarle un día a prepararte la comida de toda la semana. Si quieres saber cómo hacerlo visita el post Cocina una vez para varios días ¡Ahorra tiempo y come sano!
Si tienes todas las comidas preparadas sólo las tendrás que ir sacando del congelador a lo largo de la semana. Usa tapers transparentes para ver lo que hay dentro o de diferentes colores para cada alimento; por ejemplo el verde para las verduras, el azul para el pescado y el rojo para la carne, así al abrir el congelador sabrás fácilmente lo que hay en cada uno.
Es muy importante etiquetarlo todo con lo que hay dentro de cada fiambrera y la fecha en que lo has cocinado, así sabrás qué tienes que consumir primero.
7 – ¡BOCADILLOS!
¡Qué ricos están! Y además se pueden hacer de tantas cosas diferentes… Hay a quien le aburren los bocadillos, pero a mi me encantan.
Un truco para ahorrar tiempo cada día es durante el fin de semana preparar los bocatas de los cinco días siguientes. Para ello tienes que usar pan tierno del día, los envuelves uno a uno en una servilleta de papel, luego en papel de aluminio y por último lo metes en una bolsa hermética ¡Y al congelador! Cada día antes de irte al trabajo te sacas un bocata y cuando llegue la hora de comerlo estará descongelado. Y si en el trabajo tienes una plancha o sandwichera para darle un toque de calor entonces quedan realmente buenos.
Seguro que con estos pequeños trucos el comer de taper lo vas a ver de una forma diferente, ya nunca más será aburrido.
Seguro que tú tienes otras ideas geniales, ¡Compártelas conmigo! Cuéntame en los comentarios cómo te organizas con las comidas para el trabajo.
Si aún no tienes muy claro lo de comer de taper o tienes alguna duda ¡dímelo!